Lorena Fuster.
Barranquilla, Colombia.- Almarin llevó a cabo la renovación del balizamiento marítimo de Barranquilla con el suministro de veintiocho boyas para el río Magdalena, así como ocho “faros de orilla” que sustituyen a las anteriores torres reticuladas.
Ambos proyectos fueron desarrollados bajo petición de la Dirección General Marítima Colombiana (DIMAR) en su proceso de mejora y homogeneización de sus señales marítimas en Colombia, cumpliendo ahora con la normativa IALA y con la colaboración de INER consultores y Cenacol.
Las boyas para este río fueron diseñadas específicamente para soportar sus fuertes corrientes, que pueden alcanzar hasta seis nudos. Para combatir estas condiciones, las boyas fueron diseñadas con más volumen y con una piel de elastómero reforzada.
Las boyas, que forman parte de la gama Guia W, están fabricadas con un castillete de acero inoxidable y un flotador de polietileno de célula cerrada, aportando robustez, visibilidad y estabilidad en este río de exigentes condiciones.
Los ocho postes, modelo ALT7 fabricados en acero inoxidable con bases de hormigón, proporcionan una mayor visibilidad que las anteriores torres reticuladas y cumplen con la normativa IALA. Por último, Almarin también ha proporcionado cuatro boyas para delimitar la zona de Santa Marta en Colombia.
Anteriormente, Almarin ya ha trabajado con DIMAR en el suministro de más de cien boyas en los puertos de Cartagena y Buenaventura, así como en el balizamiento de las islas de San Andrés y Providencia. Almarin forma parte del Grupo Lindley, que este año celebra sus 85 años desde su fundación, suministrando y prestando servicio en los sectores marítimo-portuario e industrial.