Susana Cruz.
Manzanillo, Col.- Con el inicio de la temporada de huracanes en el Océano Pacífico, los dos buques abastecedores, Golfa 1 y Golfa 3, de la empresa Bunkers de México, ponen en peligro la seguridad de las instalaciones portuarias y de la navegación en este puerto, alertó la Unión Nacional de Marineros.
El secretario general del sindicato, Honorio Galván Aguilar, informó que los barcos abasteceros de combustible Golfa 1 y Golfa 3 en este momento: “no son autónomos para enfrentar un mal tiempo pese que no cuentan con combustible en sus cisternas representan un riesgo ante una eventual colisión”.
Los barcos se encuentran el fondeadero, a la deriva, ante la quiebra de la empresa; el sindicato esperan el apoyo de la autoridad laboral para rematar los bienes y liquidar a 17 trabajadores que mantienen bajo resguardo a las embarcaciones desde julio de 2015 cuando la naviera mexicana resultó insolvente para hacer frente a sus responsabilidad económica.
Precisó que la próxima semana sostendrán el enésimo encuentro con representantes de la empresa Bunkers de México que opera a través de su filial, Logística Service Sapi, para buscar una solución definitiva a un adeudo de alrededor de dos millones pesos que adeuda al sindicato y 17 trabajadores que laboraban en los buques Golfo I, Golfa 2 y Golfa 3, éste último atracado en un muelle de una empresa atunera, ya incapaz de navegar.
Agregó que la empresa también enfrenta adeudos con varios acreedores, sin embargo, en el caso de rematar los bienes de la firma por prioridad se liquidará a los trabajadores agremiados a la Unión Nacional de Marineros.
Bunkers México de México, ingresó al mercado de la proveeduría de combustibles en los principales puertos del país por una concesión otorgada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en la época de Carlos Ruiz Sacristán que le otorgó la prebenda a los empresarios Medina Patiño y Ricardo Ruiz Medina, primo del entonces secretario.
