Susana Cruz.
Barcelona, España.- El Edificio ASTA del Port de Barcelona, actualmente en proceso de reforma y modernización, se abastecerá con energías renovables. El Consejo de Administración del Port de Barcelona ha aprobado la modificación del proyecto de reforma que permitirá adaptar el sistema de climatización para abastecerse de energía renovable procedente de la red de frío y calor que la empresa Ecoenergías Barcelona está desarrollando en la zona sur de Barcelona.
Así, de forma pionera, el futuro edificio ASTA no sólo consumirá electricidad verde con garantía de origen, como todos los edificios de la Autoridad Portuaria de Barcelona, sino que su sistema de climatización y el abastecimiento de agua caliente sanitaria también funcionará con energía renovable, reduciendo al mínimo su impacto en el medio ambiente.
El suministro de energía térmica con Ecoenergías permitirá aprovechar el potencial de la red de frío y calor que la empresa está desplegando y que suministrará energía para la climatización de 11.000 viviendas y otros edificios del barrio de La Marina del Prat Vermell así como a los sectores industriales del Port de Barcelona, la Zona Franca, Mercabarna y el sur de l’Hospitalet.
Aprovechamiento del frío de la regasificación
La red de frío será un ejemplo innovador de economía circular pues aprovechará el frío residual que genera la regasificación del GNL que llega en barco a la terminal de Enagás, en el Muelle de la Energía.
El GNL llega en barco en estado líquido refrigerado a -160º y en el proceso de transferencia a la red de gas en forma de gas natural tiene que calentarse hasta los 15º. Hasta ahora, este proceso se hacía con agua de mar, de forma que el frío se perdía, pero el sistema de recuperación del frío que Ecoenergies está desarrollando en el Port de Barcelona desde mediados de 2022 permitirá aprovecharlo, creando un circuito de líquido refrigerado a -20º que se distribuirá por la red y se aprovechará principalmente para usos industriales, aunque la red también permitirá suministrar frío para la climatización de edificios.
Este innovador sistema permitirá ahorrar 32.000 toneladas de CO2 anuales evitando el uso de refredadors eléctricos convencionales como los que utilizan las industrias o, en menor escala, los equipos de aire acondicionat tradicionales. Al mismo tiempo, se evita su impacto sonoro y visual así como gran parte de los costes de mantenimiento y se libera el espacio que ocupan en los edificios.
Este sistema se complementará con la producción de calor a partir de una caldera de biomasa en la Zona Franca, aprovechando los residuos orgánicos que generan los parques y jardines de Barcelona y que permitirá alimentar los intercambiadores de calor necesarios para la calefacción de los edificios y el suministro de agua caliente.
El presidente del Port de Barcelona, Lluís Salvadó, ha considerado que “la participación en la red que está desplegando Ecoenergías Barcelona, tanto como origen y como consumidor de energía renovable, es un paso más en la transición energética que está impulsando el Port de Barcelona y demuestra nuestro compromiso con la descarbonización de la actividad portuaria” a la vez que permite impulsar innovaciones en materia de economía circular, como será el caso del proyecto de aprovechamiento del frío residual generado en la regasificación del GNL, un proyecto pionero en la Unión Europea por su volumen y escalabilidad.
